Tablones (Oña) -
Valcabadillo
22 de abril de 2007
Por Rodolfo
Bueno, aquí viene la crónica de mi primer vuelo de más de 100 kms, que ya
me tocaba.
Es domingo 22 de abril de 2007 y tenemos Liga Cantábrica + Liga Norte en Oña
(Burgos). Nos llevan al despegue de Tablones, 1100 metros, (justo encima de
Herrera de Valdivielso) y ponen una prueba que nos parece difícil, teniendo
en cuenta el viento del E. Además el tema de la compe se va retrasando
mientras el cielo ya pinta bien. Qué digo bien, pinta de la hostia.
Gorka me propone pasar de la prueba e irnos de cross; me lo pienso 1 minuto
y acepto. Hablamos con Víctor y Diego, los pilotos locales, y nos cuentan un
poco como abordar el tema. Abrimos a algunos pilotos amigos el tema del
cross, pero solo Raúl acepta. Pues vamos los 3 intrépidos, sin conocer para
nada la zona. La aventura es la aventura...y el cross-country es el
cross-country.
El primer problema es despegar. ¿A norte o a sur? Lo mejor nos parece el
sur, pero entran más rachas de norte. El viento es claramente del E. Optamos
por despegar al sur. Esperamos a que entre la racha, pero nada. Alguna
intentona hacia adelante con enganchón en arbusto y nada. Cuando casi nos
vamos al norte entra la racha y Gorka despega hacia adelante, yo levanto de
espaldas. No hay tiempo para pensárselo. Raúl sale unos minutos más tarde.
En la ladera está un poco movido. Teniendo en cuenta que está del E y hay
una costilla a nuestra izquierda, está mejor de lo que cabría esperar.
Al poco de andar por la ladera se desprende un buen ciclo y subimos a 2000,
al poco a 2400. La deriva nos lleva hacia el W, pero no hay mucho viento,
quizás 15 km/h. Pues ya estamos en marcha, los 3 juntos y dirección W,
buscando las calles de nubes. Al NE se ve un cúmulo-nimbo de libro, aunque
no es muy grande. Por el N se ve muy oscuro, pero está lejos.
Nos metemos por el sur de las Hoces del alto Ebro y Rudrón, una planicie de
1000 metros de altura con barrancos de 300 metros. Avanzamos de nube en
nube. Esta primera hora fue la más movidita porque prácticamente pasabas de
golpe del -2 al +4. Pero bueno, nada del otro mundo.
Por la radio nos avisan de que en el despegue está lloviendo y se oye algún
trueno. Bueno, ya estamos algo lejos, pero conviene tener ojos en la nuca y
no despistarse.
Hay alguna nube un poco negra y por la radio propongo ir por la calle de
nubes de más a la izquierda, para escapar al cielo azul si se pone feo, cosa
poco probable porque el cielo delante de nosotros está precioso de
cumulitos. A Raúl le parece buena idea y Gorka no dice nada, mientras va a
por una nube bastante negra. Pienso que quiere asegurar buscando lo más
heavy, pero la verdad es que se quedó sin radio y no nos escuchó. Pues
resultó que la nube negra no tiraba y hacía una buena sombra lo que dejó a
Gorka muy abajo, mientras nosotros seguíamos. No consiguió remontar y por
allí se quedó.
Mientras, Raúl y yo vamos de la mano y aparecemos en un valle muy amplio,
atravesado por la N-627. Estamos encima de un pueblo llamado Basconcillos
del Tozo y aquí se acaban las nubes. Empezamos a ratear con un +1 roto, que
ni fu ni fa. Al rato se consagra en un buen +1 anchote. Y visto lo visto ahí
nos quedamos.
De repente, sorpresa, se empiezan a hacer más nubes delante de nosotros. Y
es que era la tónica del día. La tormenta que venía por detrás (a unos 30 ó
35 kms) iba despertando las térmicas. Yo creo que venía muy lenta, entre 15
y 20 km/h, porque nosotros íbamos un pelín más rápido y si esperábamos se
nos hacían calles de nubes al poco rato. Los cumulitos que teníamos por
delante se inflaban cuando llegábamos nosotros. Así de fácil lo teníamos.
Total que el +1 pasó a +4 y subimos a 3100. Y con eso tiramos para adelante.
Pero en este valle las cosas cambian. Está más difícil. El relieve es más
plano, quizás eso influya. Bajamos a 1500 y nos empezamos a poner nerviosos.
El suelo está a 900 metros. Vemos una peña enorme y vamos disparados en una
apuesta a cara o cruz. Es la Peña Amaya de 1300 metros. Parece como si
hubieran plantado una mesa en medio de una sala vacía. Esa sensación da esta
peña.
En los alrededores de la peña los buitres están muy bajitos. Eso me da mala
espina, aquí pensé que se nos acababa el vuelo, llevábamos unos 60 kms. Al
poco me agarro a un +2 muy roto. Al rato miro a mi alrededor y en la otra
esquina de la peña se está haciendo una torre de buitres. ¡¡A por ellos!!
Toma +3 y hasta 2300. Mmmm, me parece poco, pero no hay más. Raúl no
consigue subir y anda rascando por las paredes y saludando a los montañeros.
Yo sigo a por una nubecita que se está haciendo. Justo en ese
momento Raúl grita por la radio: “la enganché”. Tres minutos más tarde miro
hacia atrás y le veo 5 kms detrás de mí, encima de la Peña Amaya con alturón.
¡¡Buena remontada!!
Pero dura poco la alegría. Yo me hundo hasta los 1300. No pillo nada
decente. Al poco algo que me sube 400 metros y se para. Vaya leches. Avanzo
un poco a por otra nube. Un +2 anchito, aquí me quedo. Al poco Raúl me dice
por radio que ha pinchado. Yo estoy super cansado pero no voy a dejar este
+2 de lujo. Joer y tanto, me pone a 3000 nada menos (impresionante, fijaros
en el track lo recta que sube esta térmica, es la que va de 17:50 a 18:00).
Estoy encima de Herrera de Pisuerga y la N-611. Pues hala, a seguir solito.
Por cierto al norte se ven muy bien los Picos de Europa por la zona de
Reinosa.
La verdad es que el cielo delante de mí es completamente azul, estoy muy
cansado (la última térmica dejaba la cabeza colgando hacia atrás para paliar
el dolor de cervicales), así que pienso “bueno, lo que me dé el planeo y se
acabó”.
Pero la verdad es que hago un planeo muy bueno, sin descendencias. En 20
minutos hago 14 kilómetros y me pongo en 82 desde el despegue. Aquí empieza
la lucha psicológica. Una frase en mi cabeza “una térmica más y te plantas
en los 100”.
Así que sin fuerzas pero lucho por ello. Encuentro cosas flojitas que muy
poco a poco me suben hasta 2400. Un mal giro y te salías de la térmica. Todo
el rato corrigiendo sin descanso. Creo que fue lo peor del vuelo. Tan
cansado y tener que pelear tanto.
Bueno, llevo 89 kms y tengo poco más de 2400. Me da tiempo a pensar:
teniendo en cuenta que el suelo está a 900 con un planeo optimista de fineza
9 haría 103 kilómetros. Un poco justo. Una descendencia cabrona y adiós a
las 3 cifras. Así que tiro un poco y vuelvo a girar lo poco que encuentro.
Subo a 2500 y llevo 93 kms. Ahora sí que sí. Me dejo caer. Me duele todo el
cuerpo y no puedo más.
Antes de aterrizar hago ejercicios con las piernas, que las tengo
entumecidas y no hay viento, con lo que me toca correr. Aterrizo en
Valcabadillo, cerca de Saldaña, en la provincia de Palencia.
Mientras espero a la recogida encima de mí se hacen cúmulos y veo a un
buitre altísimo. Lo dicho, era la tónica del día.
En una hora y algo estaba recogido. Llegamos a casa a las 3 de la madrugada,
je, y al día siguiente lunes.
Resumen en datos:
Distancia: 106,4 kms
Despegue: a las 14:45 de 1100 metros
Aterrizaje: a las 19:16 a 1020 metros
Duración: 4 horas 30 minutos
Altura máxima: 3182 metros
Max vario: +5 m/s
Vario: en general eran +3 y +4 la primera mitad del vuelo y entre +2 y +3 la
segunda
Plegadas: 1
Otras incidencias: la próxima vez abrígate más, date crema solar, come algo
antes de volar y llena el camelback, capullo.
Agradecimientos:
-A Gorka Elduayen y Raúl Oronoz, mis compañeros de vuelo
-A los que nos ayudaron en el despegue (ellos ya saben quienes son)
-A los que nos dieron consejos en el despegue y por radio (estos también
saben quienes son)
-A más gente que seguro que se me olvidan (síííííí, tú también)
Agradecimientos especiales:
-A Rakel por la pedazo recogida.
Agradecimientos muy especiales:
-A Rakel por aguantarme, la verdad